Por: Nar Saúl Ramírez Analco

En pleno siglo XXI en México el consumo de cannabis es parcialmente permitido, los consumidores no tienen pleno uso de su derecho humano del libre desarrollo de la personalidad. El enfoque de derechos humanos en las políticas públicas es fundamental, su integración a los planes municipales, estatales y nacionales de desarrollo tiene que ser sincrónico con el avance normativo en la materia de regulación del cannabis.

La inclusión de perspectivas actuales y objetivas en el tema es fundamental para que los distintos estados de la república adopten posturas simétricas dado que naturalmente muchas regiones del país como Guerrero, Sinaloa, Michoacán o Sonora son productores por naturaleza de cannabis. En donde no estaría en juego solo el derecho humano al desarrollo de la libre personalidad, sino que también en mi opinión se atenta contra el libre desarrollo de las comunidades indígenas, que en buena medida son productoras.

Desde la óptica turística por ejemplo en mi opinión nuestro país dada su alta penalidad en materia del uso lúdico del cannabis ha dejado de recibir turistas que en su país de origen pueden hacerlo de una forma más libre y al llegar a México se ven envueltos en un profundo cambio paradigmático y epistemológico porque la sociedad mexicana percibe uy distinto el tema a la sociedad californiana por ejemplo, o no se hable de la portuguesa.

La relación entre política públicas y derechos humanos es inherente eso ya es innegable y no obstante el cumplimiento y la garantía de esos derechos aún significa un reto para los tres poderes del estado.  La legislación del cannabis es trascendental por lo que significa como rompimiento de paradigma de una sociedad resistente a cambios de temas como este, la adopción homoparental, el aborto, etc.

El marco jurídico mexicano contra las drogas se constituye a partir de diferentes legislaciones de las que sólo mencionamos: el Código Penal Federal, la Ley General de Salud, el Código Federal de Procedimientos Penales, la Ley Federal contra la delincuencia organizada y la Ley de Narcomenudeo… En el contexto mexicano, los tratados internacionales se han plasmado primordialmente dentro de la tipificación de delitos contra la salud.”[1]

Por otro lado, resoluciones de la SCJN has esclarecido el tema y “hace la precisión de que esta declaratoria de inconstitucionalidad no supone en ningún caso autorización para realizar actos de comercio, suministro o cualquier otro que se refiera a la enajenación y/o distribución de las sustancias antes aludidas, en el entendido de que el ejercicio del derecho no debe perjudicar a terceros.”[2]

Y eso en la esfera jurídica por supuesto, en materia de ejecución de políticas públicas con enfoque en derechos humanos nos quedamos aún más cortos puesto que es prácticamente inexistente y cualquier consumidor tiene naturalmente que acudir al mercado negro y por ende, no solo generarle un beneficio a las mafias sino sobre todo ponerse en riesgo. Es prácticamente como si el sistema estuviera diseñado para generarle clientes al crimen organizado.

REFERENCIAS

1) Hernández Alicia y Jorge Lora, el debate entre la legalización y las políticas públicas en México, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.  Piso 15 Editores, Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. p.90.

2)  Suprema Corte de Justicia de la Nación, Extracto del Amparo en Revisión 237/2014, Dirección General de Derechos Humanos, México p. 12.


[1] Hernández Alicia y Jorge Lora, el debate entre la legalización y las políticas públicas en México, Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.  Piso 15 Editores, Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. p.90.

[2]  Suprema Corte de Justicia de la Nación, Extracto del Amparo en Revisión 237/2014, Dirección General de Derechos Humanos, México p. 12.

Nar Saúl Ramírez Analco: Asesor político de comunicación estratégica especializado en entrenarte para entrevistas en medios, exposiciones, discursos y debates.